¡Hola a todo/as!
Si os interesa el mundo del bricolaje, DIY y las manualidades, es muy seguro que la palabra Chalk Paint os resulte más que familiar. Incluso alguno/as ya habréis experimentado en primera persona las bondades de ésta pintura de la que súbitamente todo el mundo habla y en todas partes se utiliza.
Para las personas que estéis menos familiarizadas con ésta nueva pintura que está revolucionando el mundo del DIY y la restauración de muebles, hemos decidido explicar de una manera sencilla qué es exactamente la Chalk Paint y por qué gusta tanto. Ya avisamos que la fama y popularidad que tiene son merecidas y estamos convencidos que después de conocerla un poco más, correrás a comprar un bote y ¡sucumbir a sus encantos!
Chalk Paint es una pintura al agua cuyo ingrediente principal es la tiza (como así indica su nombre en inglés). Éste efecto tiza provoca que el acabado de la pintura sea mate y empolvado, muy típico de las decoraciones de inspiración nórdica y vintage, entre otras.
Vía Pompeli
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Normalmente la paleta de colores de éste tipo de pintura suele ser de colores pastel y suaves, muy acorde a la clara influencia nórdica (hace poco dedicamos una entrada para hablar sobre ésta tendencia decorativa que puedes leer aquí).
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Principales características del Chalk Paint
La principal característica y gran ventaja de la Chalk Paint es que no requiere preparar la superficie que queremos pintar. Pero hay más:
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Vía Dekoholic
¿Cómo utilizarla?
Como no requiere ninguna preparación especial de la superficie, pintar con Chalk Paint es muy sencillo, lo que la hace ideal para los DIYs y restauraciones de muebles antiguos que queremos hacer en casa sin disponer de muchas herramientas.
Vía LeroyMerlin
Normalmente cuando queremos pintar sobre una superficie previamente tratada o restaurar un mueble, es recomendable lijar o decapar la superficie para prepararla para que así la pintura se adhiera mejor. Por suerte, éste no es el caso de la Chalk Paint ya que se adhiere muy fácilmente en cualquier superficie. Ni siquiera cuando la ésta ha estado previamente barnizada, pintada de otro color o encerada.
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Antes de pintar tan sólo debemos limpiar la superficie con un trapo húmedo y un poco de amoníaco. Ésta es la única preparación que necesitamos. Apenas nada ¿verdad? Sobretodo si lo comparamos con el tiempo y esfuerzo invertidos cuando tenemos que lijar e imprimar. ¡Es una pintura todoterreno!
Vía Hometalk
Podemos aplicarla con rodillo o brocha. La elección dependerá de la superficie a pintar. Si ésta es muy extensa y lisa, mejor optar por un rodillo. Si por el contrario se trata de un mueble con muchos detalles y pequeños recovecos, una brocha ovalada nos facilitará mucho la faena ya que nos permite llegar a todos los rincones.
No existe una manera universal para aplicar ésta pintura ya que dependerá del acabado que buscamos conseguir (¡que pueden ser muchos!). Pero si optamos por un tono liso y acabado impoluto sin ningún tipo de efecto ni decapado, podemos lijar muy suavemente entre capa y capa de pintura (con dos será más que suficiente).
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Una vez bien seca la pintura (¡nada de impaciencias! Debemos respetar el tiempo que nos indique el fabricante para que el resultado sea óptimo) podemos aplicar barniz al agua o cera para aumentar la resistencia de la pintura y mejorar su acabado final. La cera, además de proteger la pintura, también nutre la madera y la deberemos reaplicar una vez cada año más o menos. Dejamos que se seque un par de días y ¡listo!
Vía Hadasycuscus
La limpieza de los pinceles y brochas también es muy sencilla. Tan sólo se necesita agua y un poco de jabón neutro en caso de colores más oscuros.
Con ésta pintura se pueden crear muchos acabados diferentes: decapado, envejecido, etc. Es perfecta para restaurar muebles antiguos y darles un lavado de cara que los transformará en un mueble totalmente distinto al que teníamos.
Vía Hometalk
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¿Cómo cuidar un mueble pintado con Chalk Paint?
Realmente un mueble pintado con Chalk Paint no necesita ningún cuidado especial. Para limpiarlos con un trapo húmedo (y si quieres un poco de jabón neutro) bastará. Es muy importante no utilizar ningún producto "limpia-muebles" si has utilizado cera.
En el caso que el mueble se rascara o saltara un poco de pintura, volvemos a pintar la zona afectada y quedará como nueva. ¡Otra ventaja más!
Existen algunas "recetas" para hacer Chalk Paint casero. Sin embargo, en éste caso nosotros optaríamos por comprarla y no hacer experimentos. Pese a ser un tanto cara, cunde mucho y todos los beneficios que proporciona no son fáciles de conseguir con una mezcla hecha en casa.
Son bastantes marcas las que la comercializan, así que no es nada difícil encontrarla en cualquier tienda de manualidades, arte o bricolaje.
Si te ha gustado este tipo de pintura y te animas a utilizarla, en una entrada anterior la utilizamos en un DIY: un perchero pintado con chalk paint. Es muy sencillo y fácil de hacer y el resultado es espectacular.